Pymes: Fortalecimiento en tiempos de crisis
Así parecen sentirse las compañías luego del reciente proceso de intervención del Gobierno en el sector comercio que obliga por un lado a la reducción forzosa de precios de venta estableciendo topes en las ganancias y al mismo tiempo a poner en marcha una figura para que los pequeños y medianos comerciantes puedan fijar, con la ayuda del Estado, los “precios justos”.
El Gobierno anunció la creación de ese registro nacional de pequeños y medianos comercios, a fin de determinar sus necesidades sin que éstos tengan que asumir pérdidas, según lo dijo el presidente de la República, Nicolás Maduro.
A juicio de los analistas participantes en el Foro Visión de Negocios realizado por el Mundo, Economía y Negocios, los empresarios están desconcertados. Aún no se tiene mayor información sobre el nuevo organismo y se desconoce si se trata de ofertar un subsidio directo o de dar facilidades para la importación de bienes.
De acuerdo con estudios de la Universidad Metropolitana (Unimet), 80% de los comerciantes del país son pymes, gran parte familiares. Muchos han cerrado sus puertas en la última década por las medidas macroeconómicas, y los comercios que continúan están preocupados por la reposición de sus inventarios para el año 2014.
El Gobierno, por su parte, señala que en Venezuela están desapareciendo las empresas especuladoras y que serán reemplazadas por nuevas organizaciones alineadas con las políticas de “justicia social”.
Lo cierto es que, en medio de las divergencias ideológicas, los analistas coinciden en recomendar a las compañías que resistan las vicisitudes y que desarrollen estrategias de fortalecimiento interno, a fin de ser sostenibles.
Por ejemplo el presidente de Consecomercio, Mauricio Tancredi observó que la medida podría ser una oportunidad para que las pequeñas y medianas empresas (pymes) puedan adquirir mercancías e insumos a costos razonables, lo que les permitiría cumplir con los precios de venta establecidos desde el Estado.
Por otro lado considerando que gran parte de las empresas del país son familiares, la economista Patricia Monteferrante, observa que ese tipo de organizaciones tiene gran potencial para ser resilientes, adaptables y sostenibles, incluso por encima otras.
Potenciar recursos internos
“Usualmente se tiene la percepción de que las empresas familiares son pequeñas unidades económicas, con tecnología obsoleta y sistemas administrativos incipientes, pero no necesariamente es así”, desmistificó Monteferrante.
Walmart, Cargill, Gap, Ford, Benetton, Ferrero, Marriott, Hallmark, McGraw-Hill, Johnson, Estée Lauder, Samsung, LG, Odebrecht, son compañías familiares que han ido creciendo.
“El 70% de las empresas del mundo son familiares y generan entre 70% y 90% del PIB del planeta. En América Latina, nueve de cada diez compañías pertenecen o pueden asociarse a grupos familiares. Y en Venezuela, 92% también son familiares”.
Esto demuestra que este grupo de compañías aprende a crecer, incluso en entornos difíciles. Hoy en día, por ejemplo, Ford Motors (propiedad de la flia. Ford) genera ingresos del orden de los $163,4 billones, Samsung (flia. Lee) $98,7 billones, Walmart (flia. Walton) $244,5 billones, y LG Group (flia. Koo, Hub) unos $81 billones.
Se calcula que en Chile existen 15 grupos familiares que controlan 50% de la Bolsa de Santiago, y en Korea 10 grupos familiares aportan 60% del PIB nacional.
En Venezuela, bien conocidas son Empresas Polar (flia. Mendoza), Grupo Cisneros (flia. Cisneros) y Ron Santa Teresa (flia. Vollmer), así como muchas otras de distinto tamaño.
“Si las compañías familiares son el motor de la economía mundial, acá también se puede seguir esa tendencia, fortaleciendo las nuestras”, dijo Monteferrante.
Desafíos internos
Para manejarse ante las dificultades del entorno, las empresas familiares deben afrontar antes sus vulnerabilidades internas, como la confusión de espacios y roles que suele darse sobre todo en las primeras etapas de constituidas.
“La empresa no puede ser la caja chica de la familia y no debería haber mayor problema en desvincular a un familiar que no cumple su trabajo. Sin embargo, son comunes la mala administración y nepotismo, que obstaculizan el progreso”, señaló Monteferrante.
Otro de los aspectos a superar son los conflictos de orden interpersonal entre los miembros con lazos sanguíneos, quienes habitualmente ocupan cargos de dirección. En este tipo de compañías los problemas con frecuencia dejan de ser cognitivos; es decir vinculados a las tareas, para dar lugar a los afectivos: rivalidades entre hermanos, voluntades e intereses diferentes entre padres e hijos.
Muchas empresas tampoco definen planes de sucesión, lo que las condena a futuro. Según estadísticas del Iesa, 70% de las empresas familiares desaparecen en la transición de la primera a segunda generación, y del 30% restante, 13% sobrevive a la tercera generación. “El ciclo de vida de estas compañías, si no se enfrentan adecuadamente sus principales desafíos, es 50% más corto que las organizaciones no familiares”, advirtió la economista.
Qué hacer para sobrevivir
Como prioridades básicas, las empresas familiares deben aclarar sus objetivos duales (rivalidad de metas financieras y afectivas), profesionalizar sus gerencias y definir un plan de sucesión, sin ambigüedades. A veces, se requieren asesores externos para lograrlo.
Pero existe otro factor vital que cuidar: la riqueza socio-emocional de la familia, entendiendo por tal al capital afectivo de los propietarios, fundamentalmente los valores, que derivan al control de la compañía.
“Es cierto que muchas empresas familiares son adversas al riesgo, pero no lo son si sienten que la pérdida de su riqueza socio-emocional está en riesgo. En casos de peligro, son capaces de desarrollar una increíble fuerza por sobrevivir, que generalmente no la tienen otro tipo de compañías”, observó Monteferrante.
De acuerdo con diversos estudios en la materia, cuando existen riesgos elevados de perder la empresa familiar, de que esta sea intervenida por terceros o al sentirse amenazados por el entorno, los propietarios llegan a elegir cursos de acción totalmente innovadores, de alta competitividad y fuera de lo esperado, con tal de preservar la compañía y poder pasarla a sus hijos y nietos. Obsérvese que esas acciones arriesgadas no serían adoptadas en situaciones normales de entorno.
También está comprobado que las compañías que sobreviven tienen más desarrollada su capacidad de resiliencia; es decir, la habilidad para sobreponerse. Y como estrategia, se enfocan en sus capacidades, valores y atributos positivos y no tanto en sus debilidades. “La resiliencia suele ser mayor que en sus homólogas no familiares, porque ese factor está relacionado al potencial generacional y a la perspectiva de largo plazo. La empresa familiar es un caldo de cultivo para las relaciones, dado que son vistas con respeto por terceros, por lo que significan en términos de tesón y valores transgeneracionales. Se puede aprovechar mejor ese aspecto para salir adelante. Incluso, muchas se han internacionalizado haciendo buen uso de esos vínculos con el exterior”, agregó Monteferrante.
Orientación emprendedora
Las empresas familiares que aprenden a gestionar el capital social y a transmitirlo adecuadamente a la siguiente generación tienen mucho a su favor.
“Los abuelos y padres transmiten el conocimiento tácito del negocio, incluso sin darse cuenta, a sus hijos y nietos. Ese saber no se adquiere con la educación formal, sino en el fuero interno de las familias”, dijo la economista.
A su juicio, el valor fundamental a transmitir es el espíritu emprendedor. “Existe un líder, que es el fundador de la empresa o alguien que destaca por su visión o emprendimiento, quien debe pasar esos valores a la alta gerencia, y de esta a los equipos de trabajo, para que perduren”, concluyó.
Muchas empresas se encuentran en esa línea, pero el “juego” de la supervivencia en el país no es fácil y requiere de largo aliento.
Leer más en: http://www.elmundo.com.ve/noticias/negocios/empresas/empresas-familiares-resisten-los-azotes-del-entorn.aspx#ixzz3NsJTLtBG
comentarios
Ahora bien, ser emprendedor es un estado lógico que produce una conducta o comportamiento previo a la presentación de una propuesta de valor, el ser humano por naturaleza es emprendedor de forma individual o colectiva, y solo alcanza el logro cuando su propuesta de valor es aceptada por los interesados al darle el justo valor en cualquier ámbito, (puede conducir o no a la creación de una empresa), lo mas importante es resolver o solucionar. el emprendedor aporta y depende a la misma vez de la sociedad, como el vendedor depende de quien compra para poder vender.
El emprendedor sabe que soluciona, porque soluciona y a quien le soluciona, quedando en manos de quien esta interesado en su propuesta de solución para saber cuando, donde y como la aplica.
El sentido lógico del emprendedor es que primero nace, luego se comporta y por ultimo se conduce a la presentación de una propuesta de valor, para que sea la sociedad quien acepta o declara la forma y uso en el tiempo. creándose así la intención e imaginación del desarrollo y progreso como sinergia positiva en equilibrio con el ambiente y el bienestar social.
Los empresarios aplican y desarrollan técnicas gerenciales y ciencias empresariales para, administrar de manera eficiente y productiva los procesos de transformaciones, tratando de forma eficaz de hacer el mejor uso de los recursos disponibles.
Mientras los emprendedores Emprendemos porque nos atrevemos a soñar, imaginar, direccionar la intención, conducir la acción de proponer cambios, y hacerlos realidad como elementos innovadores utilizados por la sociedad, quien es la que da el justo valor y uso.
Para desarrollar la actividad emprendedoras se requiere de una plataforma que en Venezuela no esta a la vista, esta plataforma debe considerar varios aspectos desde el punto de vista funcional:
Ley De emprendedores.
Programa de uso de fondos públicos.
Programa de formación del talento humano.
Plataforma tecnológica.
Parámetros normalizados nacional e internacionalmente.
Desde la funcionabilidad sistematizada y social, toda empresa nace y muere, se mantiene mientras sus productos son aceptados por la sociedad por diferentes medios y condiciones, (Los gobiernos en ningún caso escenario, tiene la naturaleza de generar economía), es la sociedad quien tiene la propiedad de intercambiar valores y productos para así generar economía, desde un marco legal o fuera de el, atreves de una cadena de comercialización o de manera directa, haciéndolo de uso publico o privado.
Muy particular creo que la proporción de empresa familiares no tiene que ver con su capacidad de soportar, mas bien creo que responde al comportamiento psicológico y social, como efecto generado por la tranquilidad que se deriva de la confianza interna en su directiva, descartando la angustia que distrae la toma de buena decisiones.
También creo que en Venezuela hay una forma de gestión en la dirección del Gobierno que cree estar por encima de los valores propios que tiene e integran a la misma sociedad, para poder interactuar de forma natural, esto crea un conflicto entre la planificación y el rango de acción, en la toma de decisiones dentro de la actividad (aunque se planifique en el tiempo se esta pendiente de lo que suceda para actuar en el menor corto plazo),
Por ultimo creo que la lógica obliga al uso de las tecnologías, en función de cualquier tipo de actividad integrada al bienestar social y el equilibrio ecológico, con recursos direccionados a quienes en realidad lo necesitan
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- 1 de diciembre de 2013
Jose C., - -. y 1 persona más recomiendan esto